Entre todo el ruido que forma parte de estos tiempos que contribuye a la transformación en la que vivimos, podemos encontrar, desvelar y celebrar la maravilla del flow siempre reordenando el mundo, armonizando a través de las personas y sus acciones.
Esta semana he encontrado términos como por ejemplo: “el lujo silencioso”, una manera de nombrar a un estilo de vestir que no muestre las marcas, ropa sin logotipos, aunque creado con la mejor materia, además de forma respetuosa con la naturaleza y los seres humanos.
Es la manera de seguir con el lujo, la exclusividad, fuera de las marcas del siglo XX, ya caducadas debido a que son copiadas o que son compradas por cualquiera que tenga dinero, aunque no pueda apreciar como está creada.
También he encontrado una tendencia en auge, la de los viajes para: “hacer nada”. Cada vez más solicitados sobre todo por emprendedores de base tecnológica a los que les cuesta esa práctica en su vida cotidiana. Una manera de usar el tiempo del viaje para experimentar la vida en su forma natural y que no tenga relación con hacer cosas, producir, aunque sean experiencias para contarlas, fotografiarlas o acumularlas en un ranking.
Nada más que ver pasar las nubes con las formas asombrosas, sentir en tu piel las caricias del viento, escuchar los pájaros como si supieses su idioma, tomar agua natural al comenzar un día disfrutando de cómo recorre el cuerpo en su interior, percibir las fragancias de unas flores o esencias naturales que nos conectan con la belleza, salud y gratitud.
Es curioso cómo se van transformando las cosas en los modelos sociales, incluido el lujo. El origen de la palabra lujo, está relacionado con lo extravagante en la opulencia. Una forma de violencia (exageración) relacionada en este caso con la acumulación de abundancia de material fabricado, procesado.
Así como también deriva de lujo la palabra lujuria, como una forma de exageración que colabora con el desequilibrio y la desorientación, aunque lo peor no es esto último, sino que lo provoca cualquier violencia o exageración es una falta de profundidad.
Colabora con la amnesia de la preciosa vida eterna y natural que se nos entrega al llegar a este viaje y que cada uno de nosotros pierde por el Camino de diversas formas, aunque la maravillosa generosidad de la vida y el flow siempre propone de una u otra forma que ES posible restaurarlo en la Tierra.
Ánimo con todas las tendencias, modas, estilo de vida y propuestas en el nombre del progreso, libertad, estabilidad o de cualquier movimiento con intención de usarte.
Que maravilla de tiempos para adentrarse en la vida natural donde la propia vida profundiza en ti, si te paras dentro de este contraste de ruidos, luchas, conflictos, amenazas, etc. Se dice, nunca nada nuevo bajo el sol invictus.