
Equilibrium
marzo 5, 2025
Riqueza
marzo 10, 2025Relacionarse
Vivimos a diario con ofertas de información, noticias, opiniones o experiencias cada vez más cruzadas, cada vez más contradictorias que generan conflictos, como nunca se había vivido hasta ahora y que además está abriendo las puertas a una forma de estar en el mundo, a la que nos estamos adaptando a marchas forzadas.
A la vez estos días he escuchado a una filósofa que animaba a las personas a lo siguiente: “...nosotros sigamos con lo que sentimos vivir y crear, dejando a las nuevas figuras de la exageración y la violencia con sus opiniones…”. Y esta frase resonó en mí.
Aunque con palabras diferentes, es similar a otras reflexiones que he encontrado en relación a la actitud para surfear estos tiempos. Dentro de la cantidad de información, notición, opinión o experiención que a diario llenan y sacuden los medios de comunicación, que en la actualidad hemos integrado en la vida cotidiana.
Tiempos similares a la aplicación diaria de una descarga de electricidad o lo que llamamos electroshock, con cada aparente novedad que sale desde una multitud de lugares, desde donde se emite hacia las personas. O esa es la intención que hay detrás de algunas de las informaciones que aparecen: sacudirte, moverte, movilizarte hacia aquello que desean que hagas, pienses o sientas. Sea hacia el extremo de la dualidad que sea.
Con el tipo de información que aparece delante de ti, dependiendo de como te lleves con la confianza, así como tu corazón resida en calma, así estés viviendo relaciones saludables y sientas tres de las claves más vitales, la información tendrá una consecuencia en tu reacción emocional y desde un lugar tan primitivo como el de la supervivencia, que en realidad deberíamos llamar infravivencia.
Me apunto a ello: apuesto por apreciar cada una de las maravillosas mañanas que se presentan a diario de la manera más creativa e inspirada de la mano de la fuerza creadora, comenzando por dar gracias por lo que encuentro todos los días al despertar en la delicia y la comodidad de la cama.
Una de las claves que nombraba antes es: la experiencia de una existencia en la que sientes gracia plena, lo que solemos llamar una vida con sentido, el sentido de estar agradecido por vivir.
La segunda de las experiencias es: sentir que perteneces. Que formas parte de algo “más grande” que tu personalidad que se creó en algún momento de la existencia donde te separaste, o lo que llamamos tu forma de percibir el mundo. Y ahora regresa un sentir, el de entregarse a un océano. Y con la paradoja. ES posible vivir esa entrega, sin dejar de ser tú, sino que tomas consciencia que eres más tú, que nunca.
La tercera es la experiencia de ofrecer de manera activa a la comunidad, desde donde te encuentres, tus habilidades más innatas y naturales de forma que eso ayude a otros, a quien sea que requiera de tu habilidad, sea la que sea en cada momento que se haya desvelado.
Tres experiencias preciosas. Cuando son vívidas, es cuando se hacen preciosas y preciadas. Y en ese momento, es cuando escuchas en relación a lo que ofreces de forma coherente, el aprecio sincero. El aprecio, es lo que no tiene precio, en esa experiencia de sentir, pensar, expresar y llevar a cabo de manera entretejida por el amor con un rumbo sin fin, tu actividad es: amor en acción para la vida eterna natural.
Hoy te invito a la práctica de prestar atención, estar despierto y discernir en lo que encuentres en los medios de comunicación. Las emita quien las emita, observa lo que son opiniones, informaciones, noticiones, experienciones o verdad.
La verdad es algo intransferible, es una experiencia que aparece en el ser humano, no llega por el afán de conseguir algo. No es una noticia, ya que no es una novedad. No es una información, que llega para conocer algo. No es una experiencia, que te sirve para una prueba. Y menos una opinión, dado que esta palabra proviene de opinari, formar un juicio sobre algo.
La velocidad en la transición de nuestros tiempos, hace saltar por los aires casi a diario a noticias, información, opinión y experiencias, que se prentenden llamar nuevas. De una forma u otra, el flow nos sigue animando a que aprendamos a relacionarnos con todo, en este planeta hermoso. A la vez una gran paradoja, en estos tiempos una gran cantidad de adolescentes quieren ser ricos y otra gran cantidad quieren ser artistas famosos para llevar una buena vida, una vida buena.
En una universidad, de las históricas, descubrieron después de una investigación por 75 años sobre un grupo de más de 700 personas de diversas áreas sociales, que las relaciones era lo que más salud o equilibrio aportaba a todas las personas. Por cierto, un detalle. En esa universidad, dentro de su logo o escudo, se puede apreciar una palabra en latín: ve-ri-tas.
¿Es verdad, que sentir en tu vida, que vives buenas y auténticas relaciones, aporta salud, equilibrio, armonía y paz, en tu corazón?.
Siempre en cualquier caso mejor que el aislamiento de una soledad tóxica, para la que nunca hemos nacido en la Tierra. Si no reconocemos bien las expresiones emocionales de otros, tendremos dificultades interpersonales. La neurociencia trata de averiguar cómo funciona el reconocimiento de emociones, proceso cognitivo esencial para nuestras interacciones sociales.
Según Leonardo, los rasgos evidentes son importantes. Pero también las sutilezas, como una sonrisa a punto de surgir o en peligro de desvanecerse, como nos invita en su propuesta de la Gioconda. Experiencia, lo de la sutileza, que para la IA, es ciencia ficción.
