Charles Lutwidge, más conocido como Lewis Carroll, es el escritor de la novela Alicia en el país de las maravillas, en ella se habla en forma de diálogo, entre Alicia y el conejo blanco, de la eternidad.
¿Cuánto dura la eternidad? - preguntó Alicia al conejo blanco - A veces, solo un segundo - respondió el conejo. Un segundo puede contener la eternidad. Un segundo como una puerta por donde salir del bucle similar al día de la marmota y restaurar la eternidad de tu corazón.
Como si el mundo fuera un gran bucle que contiene también eso mismo, las puertas de salida. Un espejo en el caso de Alicia, como también es un espejo en el caso de Neo en Matrix o la entrada a una autopista que no existe en los mapas, la de la Interstate 60.
ES posible que en este mismo lugar que llamamos el mundo, haya mucho lugares, de hecho es a través de los instantes a los que se refiere el conejo blanco. A los instantes de vida eterna y natural que descubrimos, estos lugares que nos parecen como de otro mundo, tal como también decía Jesús, mi reino es de otro mundo.
También ¿es casualidad? que el conejo blanco aparezca en Matrix, indicando a Neo la senda para el encuentro con el Amor de Trinity. Ese amor entre dos personas que cuando se encuentra, parece de otro mundo, así como indica ese diálogo entre Alicia y el conejo, donde ella le hace la pregunta ¿Cuánto tiempo es para siempre?.
Te animo en estos tiempos que pongas atención en los instantes, los maravillosos instantes de los que formas parte en esta vida eterna y natural. Es una invitación individual, ES posible vivirlo aunque no sirve cuando se pretende atrapar, los instantes son como el agua en su estado líquido, puedes sentirlo aunque no atraparlo.
Mientras más aprietas tu mano, más rápido se te desliza entre los dedos el agua. Por eso es precioso el arte de estar en esos instantes sin pretender atraparlos, convertirlos en un método, monetizarlos como se dice hoy en día. De hecho incluso he visto como a las personas a las que les ha pasado, cuando han intentado atraparlos, se han esfumado para el resto de sus vidas.
Vivo estos instantes cuando acompaño a personas en presencia e incluso online, es una maravilla cuando las personas se ven dentro de esos momentos, con una cara de asombro y sorpresa, se dan cuenta de forma clara, sentida. Así como el mundo sigue con su velocidad y la curva increscendo, hay claves que son atemporales y universales.
Los instantes son una de esas claves, tomar consciencia de los instantes donde todo toma otro color. Como si no fuera de este mundo, sentir gratitud en ese instante, como si no se fuera a producirse otro. Aunque la vida es tan generosa, que ES posible incluso que lo vivas a diario, en un nuevo día, para una nueva vida, en esta nueva Tierra con la victoria del Amor.