Resistencia
febrero 27, 2024
Teaser
febrero 29, 2024Actividad
¿Imaginas un porvenir donde sólo sea posible realizar una actividad que amas?, imagina por un momento que solo sea posible esta forma de llevar a cabo una actividad, sea laboral, o del tipo que sea, con amor, alegría, complicidad y dicha, una actividad que reactiva tu corazón. Tengo dos preguntas: ¿te gustaría? y dos, ¿que actividad harías en esa situación imaginada?.
Estamos en nuevos tiempos donde todo se reorganiza, donde ES posible que lo anterior acabe pasando. Comienza por saber, reconocer, qué actividad amas de corazón. Aunque podría ser, que aún no lo sepas, al haber aceptado que la vida es para trabajar. No tanto porque es una maravillosa idea tuya, solo lo has heredado, además de someterte a un modelo caducado, con unas ideas creadas por otras personas para otros tiempos y la mayoria ni existen, en este momento.
Hace años al pasear por esta ciudad, imaginaba algo que me parecía extraño en aquel momento. Todo tipo de anuncios de publicidad mostrando varias formas de comunicar sobre lo caduco que es el maltrato de la Vida, el silencio sobre el maltrato acababa, sea en la forma que sea. Y mira ahora, en este presente ya es una realidad, es una evidencia con la que crecen las nuevas generaciones, conversar acerca del maltrato de la Vida. Ese silencio ha cambiado.
Recuerdo también cuando un día comentaba con un amigo, imaginas que las personas cuando salgan a la calle, se les pueda ver cual es su estado, su relación con el amor en la vida cotidiana. Por ejemplo que podamos ver una especie de colores, un aura que lo muestra, dependiendo del estado de relación con el amor, que se viera la gran cantidad de matices de color en cada uno de nosotros. Ahora pienso que es algo que existe y a la vez asombroso el contraste de ver como crece el interés en los nuevos filtros de las app en las fotografías, los nuevos estilos de maquillaje similar como el barbicore o cualquiera de los roles tipo disfraz en nuestros días para vivir.
Hace un rato caminando por medio de la ciudad imagino esto, mientras encuentro, observo a tantas personas por un paseo en Barcelona, por donde camino a estas horas. Una gran cantidad de personas corriendo con la mirada perdida mientras corren. Es una sensación similar a ver como algunos animales son llevados al matadero. Hay de todas las edades y tamaños. Desde muy pequeños, niños y jóvenes corriendo a toda pastilla para ir al colegio, en esa práctica diaria de ver si es posible llegar antes de que sea la hora de clase, una de las primera contrarrelojes que vivimos y que nos moldea el ánimo (aunque no el alma) para el resto de la vida, para no quedar fuera del grupo.
En el caso de los más mayores, muy parecido. Parece la ciudad un gran instituto, donde todo comienza por no llegar tarde, sea para entrar en clase, en el trabajo, en la reunión de empresa, en la operación, el tratamiento, tomar un vuelo, etc. Un gran instituto donde se repiten, en diversos escenarios los mismo roles: alumnos, profesores, responsables y directores de colegio con varias formas diversas. Sea en la salud, en la administración pública, en la economía, en prácticamente todas las áreas de esta estructura social, es tremendo. Y a la vez tomar consciencia de haber formado parte de todo esto durante tantos años, sin poder verlo. De hecho estas mismas líneas, en esos años, me hubieran parecido una chorrada. (igual lo son claro jajaja).
Es una evidencia que la gran mayoría de personas si les preguntamos, si quieren ir a donde van corriendo, una gran mayoría diría: no quiero ir aunque tengo que ir. Cuando paso más días en esta experiencia de vivir y sobre todo en la ciudad, al compartir con las personas en general algún encuentro o paseo, hay una expresión común, comentan: “no tengo tiempo para nada”. A la vez manifiestan que lo que más angustia les produce, en el día a día, es la situación, la incertidumbre con el trabajo. Entonces, ¿trabajar para no tener tiempo de nada? a la vez que sentir a diario angustia por ello, ¿y por amor?.
¿Que nos está pasando?. Si lo que hacemos, todos lo hacemos por Amor, cada uno justificando lo que sea que haga, cuando la situación cada días es más extraña. Entonces ¿que es lo que hemos entendido?, que es Amor por la Vida, desde esa pizca de Vida que somos, el alma resonando en el corazón uniendo esa preciosa mezcla de origen, salvaje, indígena, originaria, natural y eterna.
La actividad laboral o la que sea que llevamos a cabo, ocupa una parte relevante de la existencia. La actividad es el Amor por la Vida. Somos lo que hacemos, lo que creamos. Aquello que hacemos, también se lo hacemos a la Vida, es un buen momento para observar si lo hacemos en consciencia del Amor por la Vida, como las tradiciones de origen.
Recuerdo que antes al conocer a alguien cuando tenías una cierta edad le preguntabas, ¿estudias o trabajas?. Me gustaría saber quien creo esa forma de comenzar a establecer un encuentro con otro ser humano. La verdad es que aún continúa la práctica, tengas la edad que tengas, se pregunta al otro ¿a qué te dedicas? qué es lo mismo que decir ¿produces o no produces?. Imaginas un momento, en que cuando nos encontremos nos preguntemos de forma natural ¿amas lo que haces?.
“La calma y el coraje del Amor por la Vida, no está relacionado con grandes cantidades, tiene relación con sentir de forma determinada, que decidimos en ese momento aceptar que estamos llamados a otro ciclo de madura-acción.” - El flow -
Estamos en nuevos tiempos donde todo se reorganiza, donde ES posible que lo anterior acabe pasando. Comienza por saber, reconocer, qué actividad amas de corazón. Aunque podría ser, que aún no lo sepas, al haber aceptado que la vida es para trabajar. No tanto porque es una maravillosa idea tuya, solo lo has heredado, además de someterte a un modelo caducado, con unas ideas creadas por otras personas para otros tiempos y la mayoria ni existen, en este momento.
Hace años al pasear por esta ciudad, imaginaba algo que me parecía extraño en aquel momento. Todo tipo de anuncios de publicidad mostrando varias formas de comunicar sobre lo caduco que es el maltrato de la Vida, el silencio sobre el maltrato acababa, sea en la forma que sea. Y mira ahora, en este presente ya es una realidad, es una evidencia con la que crecen las nuevas generaciones, conversar acerca del maltrato de la Vida. Ese silencio ha cambiado.
Recuerdo también cuando un día comentaba con un amigo, imaginas que las personas cuando salgan a la calle, se les pueda ver cual es su estado, su relación con el amor en la vida cotidiana. Por ejemplo que podamos ver una especie de colores, un aura que lo muestra, dependiendo del estado de relación con el amor, que se viera la gran cantidad de matices de color en cada uno de nosotros. Ahora pienso que es algo que existe y a la vez asombroso el contraste de ver como crece el interés en los nuevos filtros de las app en las fotografías, los nuevos estilos de maquillaje similar como el barbicore o cualquiera de los roles tipo disfraz en nuestros días para vivir.
Hace un rato caminando por medio de la ciudad imagino esto, mientras encuentro, observo a tantas personas por un paseo en Barcelona, por donde camino a estas horas. Una gran cantidad de personas corriendo con la mirada perdida mientras corren. Es una sensación similar a ver como algunos animales son llevados al matadero. Hay de todas las edades y tamaños. Desde muy pequeños, niños y jóvenes corriendo a toda pastilla para ir al colegio, en esa práctica diaria de ver si es posible llegar antes de que sea la hora de clase, una de las primera contrarrelojes que vivimos y que nos moldea el ánimo (aunque no el alma) para el resto de la vida, para no quedar fuera del grupo.
En el caso de los más mayores, muy parecido. Parece la ciudad un gran instituto, donde todo comienza por no llegar tarde, sea para entrar en clase, en el trabajo, en la reunión de empresa, en la operación, el tratamiento, tomar un vuelo, etc. Un gran instituto donde se repiten, en diversos escenarios los mismo roles: alumnos, profesores, responsables y directores de colegio con varias formas diversas. Sea en la salud, en la administración pública, en la economía, en prácticamente todas las áreas de esta estructura social, es tremendo. Y a la vez tomar consciencia de haber formado parte de todo esto durante tantos años, sin poder verlo. De hecho estas mismas líneas, en esos años, me hubieran parecido una chorrada. (igual lo son claro jajaja).
Es una evidencia que la gran mayoría de personas si les preguntamos, si quieren ir a donde van corriendo, una gran mayoría diría: no quiero ir aunque tengo que ir. Cuando paso más días en esta experiencia de vivir y sobre todo en la ciudad, al compartir con las personas en general algún encuentro o paseo, hay una expresión común, comentan: “no tengo tiempo para nada”. A la vez manifiestan que lo que más angustia les produce, en el día a día, es la situación, la incertidumbre con el trabajo. Entonces, ¿trabajar para no tener tiempo de nada? a la vez que sentir a diario angustia por ello, ¿y por amor?.
¿Que nos está pasando?. Si lo que hacemos, todos lo hacemos por Amor, cada uno justificando lo que sea que haga, cuando la situación cada días es más extraña. Entonces ¿que es lo que hemos entendido?, que es Amor por la Vida, desde esa pizca de Vida que somos, el alma resonando en el corazón uniendo esa preciosa mezcla de origen, salvaje, indígena, originaria, natural y eterna.
La actividad laboral o la que sea que llevamos a cabo, ocupa una parte relevante de la existencia. La actividad es el Amor por la Vida. Somos lo que hacemos, lo que creamos. Aquello que hacemos, también se lo hacemos a la Vida, es un buen momento para observar si lo hacemos en consciencia del Amor por la Vida, como las tradiciones de origen.
Recuerdo que antes al conocer a alguien cuando tenías una cierta edad le preguntabas, ¿estudias o trabajas?. Me gustaría saber quien creo esa forma de comenzar a establecer un encuentro con otro ser humano. La verdad es que aún continúa la práctica, tengas la edad que tengas, se pregunta al otro ¿a qué te dedicas? qué es lo mismo que decir ¿produces o no produces?. Imaginas un momento, en que cuando nos encontremos nos preguntemos de forma natural ¿amas lo que haces?.
“La calma y el coraje del Amor por la Vida, no está relacionado con grandes cantidades, tiene relación con sentir de forma determinada, que decidimos en ese momento aceptar que estamos llamados a otro ciclo de madura-acción.” - El flow -
